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sábado, 30 de abril de 2011

Algo de poesía...

Me apetecía darte un toque sin ninguna intención,
cogerte de la mano, pasear,
mirarte a los ojos, pedirte perdón
no decir las cosas sin pensar.

jueves, 28 de abril de 2011

una historia cualquiera...

de repente te das cuenta que todo te sobra, lo único que necesitas son unas piernas para caminar, un brazo al que ir cogido y un banco en el que sentarte para ver las estrellas...y al mirar a tu lado solo ves un gesto, una mirada, no hace falta nada más, das cuenta que no necesitas buscar más, lo que siempre soñaste, quisiste, esperaste lo tienes a tu lado, le plantas un beso...y en ese momento el tiempo se detiene, se hace el silencio y lo único que oyes es el corazón de la persona que tienes a tu lado, la coges de la mano y sonríes...

le dices sube, se monta en tus pies y empezáis a bailar, y el único sonido que escuchas en la noche es el paso de los coches, cierras los ojos e imaginas estar en los típicos bailes americanos de fin de curso...¿me concedes este baile?, mientras le lanzas la mano, ella ríe, te encanta su risa, que tonto que eres...pero me encantan tus tonterías y se te lanza al cuello a darte un beso, mientras tanto tu la abrazas fuerte y le susurras algo al oído...ella te mira y te planta de nuevo un beso, de nuevo cierras los ojos....

...el frío ha vuelto y las gotas de lluvia te recuerdan que es hora de irse

jueves, 21 de abril de 2011

Silencio

Escribo en el silencio de una habitación vacía, en la que las gotas de lluvia sobre el tejado marcan un incesante tic-tac.
Leo mientras en la calle el ruido de los tambores señala que los anderos avanzan sin miedo ante la lluvia.
Medito si avanzar o quedarme parado, si salir a la calle a gritar o ahogar las penas en una copa de wisky del 83.
Escucho música para evadirme, para evitar oír el silencio, para pensar que al menos por un segundo andas por aquí.
Siento el silencio y lo evito, hasta hace un tiempo casi un año el silencio me atraía, ahora me atrae salir, el bullicio de la gente, los niños gritando, la gente paseando, los novios besándose.
Ver feliz a la gente es una de las cosas más bonitas del mundo, ser felices nosotros es algo a lo que no podemos renunciar.

miércoles, 20 de abril de 2011

El Karma

A tomar por culo el Karma. No se si lo he dicho alguna vez por aquí, no se si se lo he dicho a mis amigos, a mi familia o a mi novia, seguramente se lo haya dicho a todos o quizás a ninguno, pero hasta hace un par de días creía en eso del Karma. Lo típico, si haces cosas buenas te pasan cosas buenas, si haces cosas malas te pasan cosas malas. Pero ayer me dí cuenta que el Karma no existe, a los buenos les pasan cosas malas, a los malos les pasan cosas buenas, vete a saber. El destino es un cabrón que juega en un tablero en el que nosotros somos los peones, coges los dados, los lanza y si cae par te jodes, si cae impar te libras hasta la próxima decisión. Y nosotros mientras nos aguantamos, nos jodemos y vemos como todo a nuestro alrededor se derrumba. Nuestros planes se caen como se caen los castillos de naipes cuando les soplamos, de nada sirve todo lo que planificamos, el destino coge sus dados los lanza al aire, par, mala suerte amigo y te jodes, toca llorar, toca echar de menos a alguien, toca maldecir la vida que nos ha tocado vivir...

Desde aquí mi pequeño recuerdo, seguramente ni lo leas, ni siquiera sepas que lo estoy escribiendo pero me gusta pensar que algún día lo leas y te suba un poco la moral, mucho animo.

sábado, 16 de abril de 2011

-¿Me echaste de menos?
-¿Que si te eche de menos?...Te eche de menos cuando me tuve que ir y no pudiste ir a despedirme por las horas. Te eche de menos en el autobús cuando no tenía tu hombro para poder apoyarme. Te eche de menos en el aeropuerto cuando necesitaba a alguien que me dijera por donde tenía que facturar. Te eche de menos en el avión cuando las más de 10 horas se me hicieron eternas. Te eche de menos cuando el avión iba a aterrizar y no tenía a nadie a quien agarrarme. Te eche de menos en la piscina cuando no tenía nadie que me echara la crema para no quemarme. Te eche de menos cada vez que me pedía una cerveza. Te eche de menos cada vez que volvía de una excursión y no te podía contar todo lo que había visto ese día. Te eche de menos cada vez que colgaba el teléfono y te enviaba un mensaje. Te eche de menos cuando las parejas se besaban en la playa. Te eche de menos cuando dos desconocidos pasaban cogidos de la mano. Te eche de menos cada vez que bailaba en la disco porque seguro que te reirías de mí. Te eche de menos cada vez que te compraba un regalo. Te eche de menos cada vez que me comía una hamburguesa con patatas. Te eche de menos cada vez pensaba en ti...
Aparte de eso...el viaje fue bien.